La Corte Interamericana de Derechos Humanos ordenó su realización por la discriminación de la que fue víctima debido a su orientación sexual.
Con la presencia de diversas autoridades, el Estado de Chile concretó un histórico acto de desagravio ordenado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos a raíz de la discriminación ejercida sobre la jueza Karen Atala, luego que la Corte Suprema le negó la tuición de sus hijas a raíz de su orientación sexual.
Durante la presentación, la lectura del fallo de la corte indicó que en el máximo tribunal chileno definió una concepción estereotipada del concepto de familia y que se utilizaron “argumentos abstractos, estereotipados y discriminatorios“, generando repercusiones en las menores de edad.
Karen Atala afirmó que la sentencia efectuada por la Corte Suprema representó “la sanción más grave para una madre“, al quitarle la tuición “por razones injustas”. Además recalcó que las leyes de familia están estancadas en paradigmas y que no se justifica que actualmente las personas, en razón de su orientación sexual e identidad de género, no puedan acceder a derechos, beneficios y prerrogativas legales en razón de cómo viven su vida sexual.
“La lucha dejó de ser personal ante el inexorable paso del tiempo y se transformó en política, por ello nuestro caso particular se transformó en un caso emblemático, pero era absolutamente necesario para restaurar el imperio del derecho a la igualdad en Chile“, aseguró. “Esta sentencia viene a dignificar a todas aquellas madres lesbianas y padres gays que han debido soportar estigmas”, agregó Atala.
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