Pese a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que señala que los nacimientos en un país no debieran ser más del 15%, en Chile se trata de uno de los partos más comunes -aunque es un 30% más caro e implica más riesgo para la madre- y en proporción asciende a un 48%.
En el caso del sector privado, la cifra llega al 62%, según datos del Ministerio de Salud, y según consigna El Mercurio, distintas clínicas chilenas están impulsando medidas para reducir el número de este tipo de procedimientos y acercarse al estándar internacional.
Entre ellas se encuentra la Clínica Bupa de La Florida, que actualmente tiene una tasa de 52% de cesáreas, se autoimpuso una meta que es llegar bajo el 30% en 2021. Para ello, según explicó Eduardo Faúndez, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia, están aplicando la fiscalización y control de los protocolos antes de la indicación de las cesáreas, y también análisis retrospectivos de las ya realizadas.
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También ha apuntado en la misma línea la Clínica Alemana, donde la tasa de cesáreas es cercana al 48%, mientras que la Clínica Vespucio asegura que estas estrategias implementadas le han permitido bajar la tasa de cesáreas de 70% a 44%.
Dentro de los recintos privados, la Clínica Santa María es el recinto privado que tiene el porcentaje más bajo del sistema, con una cifra que asciende a 29,5%.
Las medidas buscan restringir el acceso a las cesáreas debido a que deberán cumplir más requerimientos, especialmente luego de un estudio del Ministerio de Salud que mostró que casi la mitad de los procedimientos en el sector privado podrían no tener una justificación médica.
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