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Cerca de 1.500 personas, tanto chilenos como extranjeros, llegaron a la plaza de Coyhaique a ver un espectáculo astronómico de nivel mundial. Profesionales, fanáticos y personas que con ingenio fabricaron sus propios instrumentos para ver el eclipse de sol anular.
A las 10:30 de la mañana finalmente el eclipse parcial se convirtió en uno anular, dejando un anillo de fuego por pocos segundos, pero fue suficiente para dejar a los espectadores conformes.
El Premio Nacional de Ciencias Exactas, José Maza, expresó que “el anillo que quedó del sol era un poco más delgado de lo que yo pensaba, así que en realidad se puso bastante obscuro. A mí me emocionó mucho”.
Para más detalles revisa el video adjunto.
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