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Según información recolectada por El Mercurio, en julio de 2015, la fundación Amsca se hizo cargo de administrar el Hogar Cordillera en Puente Alto. Este mismo recinto ya había presentado desde su primera fiscalización la falta de protocolos para emergencias sanitarias, además de carencia de medicamentos, pañales y materiales de enfermería.

Esta situación empeoró con los meses debido a la escasez de comida, malos tratos a los residentes, la propagación de enfermedades y diversas irregularidades que se detectaron en las distintas fiscalizaciones realizadas hasta el 2016.

Tanto el Ministerio Público como la Contraloría han levantado investigaciones para dar con los responsables de esta situación. 

Por su parte, la Contraloría encontró faltas en el control del Senama, por la pérdida de 30 fichas clínicas y 27 certificados de defunción. Además se descubrieron fallas en fondos rechazados a Amsca -que ascienden a los 131 millones de pesos- asi como también problemas con el pago de pensiones para los jubilados residentes.

Debido a esto, durante el mes de agosto, el Consejo de Defensa del Estado interpuso una demanda por 98 millones de pesos.

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