Por Camila Flores

Si es que no cambian las condiciones en nuestro país y el Ejecutivo no renueva esta decisión, hasta el 30 de septiembre -fecha en que termina el Estado de Excepción Constitucional- los padres podrán pedir la extensión del postnatal de emergencia y crianza protegida.

El primer beneficio que se aplica a los trabajadores y trabajadoras que se encuentren haciendo uso del permiso postnatal parental durante la vigencia del estado de catástrofe, decretado para enfrentar la enfermedad COVID-19. Luego del término del permiso postnatal parental, se tendrá derecho a una licencia médica preventiva parental por causa de la crisis sanitaria para efectos del cuidado del niño o niña.

El objetivo es resguardar la seguridad sanitaria y la salud de los recién nacidos. La licencia se extenderá por un período de 30 días, y podrá renovarse por un máximo de dos veces, por el mismo plazo, en tanto se mantenga vigente el estado de catástrofe. Los períodos deben ser continuos.

También en relación con la iniciativa de crianza protegida, contempla la opción de suspensión temporal de contrato por cuidado de los menores nacidos a partir del año 2013, mientras se mantengan fuera de funcionamiento establecimientos educacionales, jardines infantiles y salas cunas por motivo del virus.

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Si bien hoy contamos con mejores cifras sobre la pandemia gracias a la exitosa vacunación que ha realizado nuestro sistema de salud -mejor ahora que estamos con la tercera dosis de refuerzo- y las condiciones e indicadores de salud son más positivos, muchos padres no pueden volver a sus antiguos trabajos, ya que no cuentan con alguna persona que les cuide a sus hijos recién nacidos, es por este motivo que considero necesario que el beneficio se mantenga vigente hasta fines del 2021.

De igual forma, considero un avance el proyecto presentado por el Ejecutivo que busca entregar más prestaciones adicionales a los padres de los recién nacidos que sean trabajadores dependientes, que hayan hecho uso de las licencias médicas preventivas y que no puedan volver al trabajo por motivos de cuidado de sus hijos, entregándoles la opción de suspensión de contrato y derecho a recibir el 70% del promedio de su remuneración imponible por tres meses, de manera excepcional y con cargo al seguro de desempleo.

Por otra parte, en el caso de los trabajadores independientes, la cobertura será a través de un bono que pagará el Estado equivalente al 70% del subsidio que ha recibido durante el uso de la LMP.

Cabe destacar que cerca de 1.500 de Licencias Médicas Preventivas Parentales (LMP), equivalentes a un 8,7% del total nacional, fueron emitidas hasta principios de agosto del 2020 en la Región de Valparaíso, según cifras de la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO).

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