Este viernes se registro una nueva jornada de violencia en Siria, completando ya una semana desde el comienzo de los bombardeos a Homs. Esta vez, se registraron dos atentados suicidas con coches bomba en Alepo, la capital económica del país presidido por Bashar al-Assad.
Los ataques se perpetraron contra edificios de las fuerzas de seguridad militar siria, los que dejaron al menos 52 muertos, entre los que se incluyen 4 mujeres y 5 niños.
La población siria, que ya soporta más de 11 meses desde el comienzo de los ataques entre las fuerzas del régimen de Bashar al-Assad y los rebeldes, hoy se manifestó contra Rusia y China, países que vetaron al resolución de la ONU que busca intervenir en el azotado país.
"Rusia está matando a nuestros niños" fue el lema de las manifestaciones de hoy, pues ya se contabilizan más de 400 menores de edad muertos en los enfrentamientos, según datos de Unicef.
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