En declaración oficial, La Moneda dio por superado el episodio con los soldados.
El cierre del proceso contra los soldados bolivianos no logró aplacar la crisis política entre Chile y Bolivia. Después de conocerse la resolución judicial, en la que los tres soldados bolivianos aceptaron la suspensión condicional del procedimiento, Evo Morales afirmó que Chile debería pedirle perdón a los conscriptos y a las fuerzas armadas de su país. Especialmente si tiene la intención de interactuar con Bolivia y quiere tener una buena relación bilateral.
Pero mientras el mandatario boliviano habló del fin del proceso como un triunfo para su país, e insistió en que todo se trató de una injusticia y que los tres soldados detenidos fueron víctimas, el ministro subrogante de la Secretaría General de Gobierno, Mauricio Lob, aseguró que: “Chile jamás va a pedir perdón por hacer respetar la ley, respetar los tratados y hacer respetar sus fronteras”.
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