La Audiencia Provincial de Zamora revocó una sentencia previa y determinó que el joven aún depende económicamente de su entorno, por lo que su padre deberá seguir pagando la pensión.
En Zamora, España, una sentencia judicial ha determinado que un hombre deberá continuar pagando la pensión alimenticia de su hijo de 24 años, debido a que este no ha logrado alcanzar la autosuficiencia económica ni una estabilidad laboral clara.
El caso fue llevado a los tribunales luego de que el padre solicitara poner fin al pago, asegurando que el joven no cursa estudios, no trabaja y tampoco muestra interés en hacerlo.
La petición, presentada en marzo, fue inicialmente acogida por un juzgado de primera instancia, que ordenó la extinción de la pensión.
Sin embargo, esa decisión fue apelada por la madre del joven.
En su apelación, la madre argumentó que, si bien la relación entre el hijo y su padre está completamente deteriorada desde hace más de diez años, ello no es responsabilidad exclusiva del joven. Además, explicó que su hijo ha tenido empleos ocasionales, pero sin lograr una inserción estable en el mercado laboral, lo cual atribuye en parte a las secuelas de un accidente que sufrió años atrás.
La instancia superior revocó la decisión inicial y resolvió que la pensión deberá mantenerse durante al menos un año más, considerando que el joven aún no ha consolidado una independencia económica.
En el fallo se detalló que su experiencia laboral ha sido mínima: tres años viviendo con familiares y solo dos meses de trabajo formal en una cadena de supermercados, lo que no basta para declarar su autonomía financiera.
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