El magnate tecnológico propone una zona de libre comercio transatlántica y mayor movilidad laboral, contradiciendo la política arancelaria de Trump.
(EFE) – En una sorpresiva intervención por videoconferencia en el congreso de la Liga, partido ultraderechista italiano liderado por Matteo Salvini, Elon Musk abogó por eliminar barreras comerciales entre Estados Unidos y Europa. “Espero que lleguemos a una situación de aranceles cero, creando efectivamente una zona de libre comercio”, declaró el CEO de Tesla y X (antes Twitter), contradiciendo la reciente imposición de tasas del 20% a productos europeos por parte de la administración Trump.
El llamado del magnate llega apenas 72 horas después de que Trump desatara una guerra comercial global, con aranceles del 10% para la mayoría de países y del 34% para China, provocando caídas bursátiles. Musk, quien se autodenomina “asesor informal” del presidente republicano, admitió haberle recomendado esta política de apertura: “Ese ha sido mi consejo para el presidente”.
Más allá del comercio, el empresario defendió “mayor libertad de movimiento” laboral entre ambos continentes: “Si alguien quiere trabajar en Europa o EE.UU., debería poder hacerlo”. Sus declaraciones resonaron en Florencia, donde Salvini —viceprimer ministro italiano y conocido por su línea antiinmigración— busca revalidar su liderazgo en la Liga.
La intervención de Musk genera interrogantes sobre su influencia real en Trump y su alineamiento con fuerzas políticas europeas polémicas. Mientras analistas dudan que el presidente estadounidense revierta su proteccionismo, el mensaje del dueño de X refleja una rara fisura entre la élite tecnológica y la agenda económica de la derecha global.
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