Faltando una semana para volver a sesionar, los congresistas deberán debatir el apoyo a Obama frente al ataque.
Barack Obama asegura que el régimen de Bashar al-Assad utilizó armas químicas contra civiles el pasado miércoles y pretende lanzar un ataque aéreo sobre el territorio sirio, mientras que las naciones que en un principio apoyaban la invasión norteamericana hoy se muestran reacias a la medida. La OTAN y la Liga Árabe se restaron del ataque y cada vez son más las potencias contrarias a la iniciativa.
La decisión final la tendrán los congresistas de Estados Unidos, quienes deberán votar a favor o en contra de la iniciativa presentada por el Presidente Obama. La división entre demócratas y republicanos se muestra de forma similar a lo que sucedió en 2003 con la invasión a Irak promovida por el entonces presidente Bush. Esta vez son los republicanos quienes piden más garantías y mayor información acerca del ataque y la invasión, pues según Obama, fue el gobierno sirio el culpable de utilizar gas sarín en contra de la población civil, incluidos niños y ancianos.
Para el Secretario de Estado, John Kerry, en la votación estará en juego la credibilidad de Estados Unidos, en una cruzada en la que Barack Obama está cada vez más solo.
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