El presidente Donald Trump firmó un decreto “sobre cómo mantener unidas a las familias y al mismo tiempo garantizar que tengamos una frontera poderosa”.
- El cambio de postura de Trump
Oficialmente revirtió el argumento de que no tenía autoridad para detener las separaciones de familias de inmigrantes indocumentados en la frontera.
A su vez, esto se produjo después de que enfrentara una presión del espectro político y de líderes religiosos y mundiales para detener las separaciones de niños con sus padres en la frontera.
“Es una violación de derechos humanos. Si tú quieres aplicar tortura psicológica a alguien, sepáralos de sus hijos. Eso bajo cualquier concepto se entiende como tortura”, aseguró Raúl Sohr.
“A un presidente que abiertamente ha dicho que la tortura es aceptable, por supuesto que el tema de los derechos humanos no necesariamente le incomoda, pero no quiere estar en un foro donde lo puedan cuestionar. De esa manera yo creo que el retiro fue, hasta un cierto punto, ponerse el parche antes de la herida”, sentenció el analista internacional.
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