Europa está buscando que Irán cumpla con el acuerdo nuclear luego que Teherán anunciara que no respetará los límites establecidos sobre la cantidad de centrifugadoras para la producción de uranio.
En Última Mirada, el analista internacional Raúl Sohr explicó que “el acuerdo se hizo para evitar una guerra en el Medio Oriente, una guerra con Irán, específicamente”.
“El gran temor de las cancillerías europeas ha sido siempre que no haya una proliferación nuclear”, señaló, y agregó que “cualquier conflicto podría escalar muy rápida y fácilmente a un nivel incontrolable. En una zona relativamente pequeña, basta que lances una ojiva y destruyes o inutilizas un área muy poblada y grande“.
En 2018 el presidente Donald Trump anunció el retiro de Estados Unidos del acuerdo y comenzó a plantear nuevas sanciones a Irán para obligar al país a sentarse a negociar. Irán, sin embargo, no dio su brazo a torcer.
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Mientras tanto, “los europeos se preguntan qué quiere EE.UU. ¿EE.UU. quiere cambio de régimen? Algunos funcionarios de la Casa Blanca dicen ‘sí, queremos cambio de régimen, queremos votar al Ayatolá y a la teocracia que hoy gobierna Irán’. Después de la caída del avión ucraniano, salen estas manifestaciones y Trump sale diciendo ‘yo apoyo a estos estudiantes. EE.UU. está con los que luchan por la democracia’. Esto Irán lo puede leer de una sola manera: EE.UU. está empujando al cambio de régimen“.
En esa línea, Sohr sostuvo que “la pugna entre EE.UU. e Irán va a seguir muy dura no va cesar, pero no va a tomar la forma de una guerra regular frontal“.
“Lo de Irán y EE.UU. no ha terminado. Esto está en una tregua, por supuesto Irán no tiene ningún interés en una guerra frontal con EE.UU., y no la tiene EE.UU. porque esto liquidaría las posibilidades de Trump. Si hubiera una guerra, Irán tiene más posibilidades de provocar un cambio de régimen en EE.UU. y sacar a Trump“, concluyó.
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