Jalifa Haftar, ex general de Muamar el Gadafi y quien ha conquistado buena parte de Libia, condicionó el llamado al cese al fuego lanzado por Rusia y Turquía.
Haftar advirtió que primero se debe cumplir con la “erradicación de los grupos terroristas” y el desarme de las milicias que controlan Trípoli, la capital del país.
Desde la caída de Gadafi, Libia ha estado en permanente conflicto con decenas de miles de muertos y sin gobierno establecido. Desde Benghazi, ubicada en el oriente de país, se estableció un Parlamento no reconocido por Trípoli que comenzó a reconquistar el país, liderado por el mariscal Haftar.
En Última Mirada de CNN Chile, el analista internacional Raúl Sohr explicó que con el avance de Haftar “se han ido agudizando las fricciones y Benghazi ha ido ganando territorio paso a paso”.
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Como consecuencia, una serie de países comenzaron a a intervenir apoyando a un bando u otro, aunque Haftar se llevó casi todo el apoyo.
Turquía, sin embargo, está del lado de Trípoli y ha pedido buscar una salida que no sea bélica, algo que con la respuesta de Haftar queda casi descartado.
“Les está poniendo una condición imposible”, sostuvo Sohr. “Él tiene la certeza de que en este momento está en control de la situación y puede ganar esta guerra”, aseguró.
Finalmente, señaló que “es posible que en las próximas semanas esto se defina militarmente”.
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