En el Día del Periodista, hay que decir que hemos recibido cariñosos saludos. También críticas, que siempre se agradecen cuando son, como dice Valdivia, con respeto.
Porque nos equivocamos, y mucho, y como este trabajo es público, parte fundamental de él es reflexionar sobre la fiscalización que hacen de él las personas para las cuales trabajamos.
En medio de este día hubo un hecho “especial” para los colegas del Congreso.
La Comisión de Ética de la Cámara de Diputados tiene que tomar una decisión sobre la patada que el diputado René Manuel García le dio al periodista de Radio ADN Kevin Felgueras. Patada negada por el parlamentario hasta que se conocieron los videos que la evidenciaban.
Pues bien, en esta instancia se decidió “invitar” al agredido para que él dé cuenta de cómo abordó al honorable que le pegó y cómo suele reaccionar cuando le niegan entrevistas. Dos errores: nada justifica una agresión y, segundo error, no hubo negación de entrevista, hubo una autoridad que no quiso contestar y ante la insistencia del periodista, terminó pegándole.
También desde la Comisión de Ética se despachó una “invitación” a quienes cubren habitualmente el Parlamento para “establecer un diálogo respecto de los criterios que deben regir el desarrollo de la labor periodística al interior de la Cámara“.
Mal. Mal día y raro que crean que ellos, los diputados, poseen algún tipo de tuición sobre la labor periodística. Tienen todo el derecho de opinar y criticar, como cualquier ciudadano, pero no son los llamados a pautearla.
Ahora dicen que el secretario de la instancia se equivocó al redactar las invitaciones. Ojalá que así sea, porque tienen tanto que hacer en esta Comisión de Ética, que para qué los vamos a distraer de sus funciones.
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