Cynthia Arnson, directora del Programa Latinoamericano Wilson Center, y Catherine Reyes-Housholder, académica del Instituto de Ciencias Políticas de la Universidad Católica, conversaron con CNN Chile sobre qué hay detrás de las estrategias del presidente Donald Trump para no conceder la victoria a Joe Biden y los desafíos del próximo presidente de EE.UU.
“Creo que va en la línea de su personalidad, de no mostrar vulnerabilidad, de nunca conceder, nunca decir que realmente ha perdido. Toda su vida ha seguido esta línea, es algo de su propio instinto y sicología”, dijo la académica de la PUC.
En tanto que la analista estadounidense añadió que “es bien funcional porque ha mandado decenas de mensajes a sus seguidores para recaudar dinero y esa es una herramienta fundamental para su futuro político”.
Los desafíos de Biden
“Es un regreso a un pasado más consensuado de la política exterior de EE.UU., pero los principios son distintos porque el mundo ha cambiado y no es posible regresar”, declaró Arnson en relación a cómo visualiza las relaciones del gobierno de Biden con el resto del planeta.
En tanto que Reyes-Housholder dice que esperaría que la relación de la Casa Blanca con el gigante asiático “va ir en esta línea de mayor diplomacia, pero el hecho de que EE.UU. es un país en declive y China está subiendo es algo más transversal, el trato va ser mejor, pero sigue con ansiedad“.
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Junto a esto, Arnson complementó que con Latinoamérica “hay un deseo de cooperar en muchos temas, cambio climático, la entrega de las vacunas contra COVID. No sería América primero, sino Américas en su conjunto y lo vamos a ver bien el próximo año cuando EE.UU. va liderar la próxima cumbre de las Américas”. “El tono y estilo y contenido de la política hacia América Latina va cambiar, el énfasis va ser democracia, DD.HH., transparencia”, agregó.
Finalmente, la académica de la UC subrayó que la pandemia de coronavirus será un tema ineludible para la próxima administración, tanto en su dimensión sanitaria como en la económica: “Siempre la filosofía de los demócratas ha sido de tratar la pandemia para tratar el tema económico, porque no se puede diferenciar entre las dos”.
“Hay mucha resistencia cultural al uso de mascarilla, muchos dicen que es mi libertad personal no portar mascarilla, que yo puedo correr mis propios riesgos y hay una falta de solidaridad y conciencia, pero tener un liderazgo presidencial para simbolizar que el uso de mascarillas es importante”, concluyó.
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