Hoy la presidenta Bachelet anunció medidas para enfrentar la crítica situación del Sename tras conmocerse la muerte de 1300 personas en 11 años. Bachelet anunció la inyección de recursos frescos, por 2.500 millones de pesos para este año y un proyecto para dividir en 2 el Sename, entre los niños vulnerados en sus derechos, y los menores infractores de la ley.
Una división que ha sido recomendada por la Unioef múltiples veces, desde 2001, y que ya estaba contemplada en un proyecto enviado por el Presidente Piñera al Congreso en 2012, y congelado por el actual gobierno.
Es difícil entender que hayan debido pasar 15 años para que se anuncie por enésima vez una idea sobre la que parece haber consenso entre los técnicos y también en el mundo político. Y aun más difícil de entender que, en vez de mejorar o modificar el proyecto que ya estaba en el Congreso, este gobierno pierda dos años y medio para volver a fojas cero con un nuevo proyecto que recién empezará a tramitarse.
Cuando hablamos de las vidas de niños y adolescentes vulnerables, nodebieran haber cálculos políticos que valgan. Qué importa quién puso la firma al proyecto, o quién está en la foto cuando se promulga. El tema es demasiado urgente e importante para esas consideraciones mezquinas. Han pasado 15 años. Años de vidas perdidas o afectadas por una acción ineficiente del Estado donde más se necesita su presencia: con los más vulnerables. 15 años que ya no es posible recuperar.
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