Una demanda por $13.140 millones presentó un grupo de 219 pescadores artesanales, recolectores y buzos pertenecientes a la Caleta de Cobija en contra de Minera Michill, propiedad de Antofagasta Minerals (AMSA), el brazo extractivo del grupo Luksic.
Según recoge La Tercera, los demandantes exigen una indemnización de perjuicios por los daños ambientales, por la “pérdida de chance” y daño moral, generados por un derrame de ácido sulfúrico en el Terminal Marítimo Michilla, episodio ocurrido en septiembre de 2017.
“Las consecuencias ambientales y por añadidura productivas de un evento de estas características pueden prolongarse por décadas, imponiendo una carga tóxica de varias generaciones a dicha comunidad”, indica el texto legal presentado por el abogado César Barros.
La empresa, asesorada por estudio Parraguez & Marín, aseguró al tribunal que tras la detección de la filtración de ácido, se operó de forma oportuna desarrollando medidas preventivas y correctivas que permitieron que no se generara un daño ambiental.
De manera oficial, AMSA se defendió, indicando que “los informes entregados por organismos privados y públicos que informaron sobre el incidente de septiembre de 2017 no registraron presencia de recursos hidrobiológicos afectados o potencialmente afectados por este incidente”.
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“Los mismos hechos objeto de la presente demanda anteriormente se presentaron en tres recursos de protección interpuestos por, entre otros, el Sindicato de Trabajadores Independientes, Buzos Mariscadores, Pescadores y Artesanos de Caleta Cobija. Todos estos recursos de protección fueron rechazados por la Corte de Apelaciones de Antofagasta, decisión que, posteriormente, fue ratificada por la Corte Suprema”, agregó la empresa.
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