Uno de los deportes más extremos que ha llamado la atención de algunos fanáticos es el salto BASE con vuelo en wingsuit, donde la persona puede alcanzar velocidades superiores a los 200 kilómetros por hora.
Ahora bien, muchos de estos deportistas disfrutan de la libertad del vuelo y lo ilimitado de su descenso, pero, ¿qué ocurre si a la prueba le sumas pasar por un agujero?
Pues Álex Villar, un paracaidista español conocer del salto BASE, pensó en una prueba como esta. La idea de Villar fue cruzar el conocido arco de Piedrafita por un espacio de no más de 7 metros. Y lo logró.
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Villar se lanzó desde la Sierra de Partacua, en Huesca, España, desde donde tenía que calcular cómo descendería planeando hasta alcanzar el momento exacto para cruzar el arco.
Anteriormente, el paracaidista noruego Alexander Polli había logrado un descenso similar, al cruzar a 250 kilómetros por hora la Roca Foradada, en Cataluña, España.
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