Pese a quedar eliminada en primera ronda del Mundial de Francia 2019, la Roja tuvo una buena participación. Esto teniendo en cuenta que era primera vez que nuestro país disputaba un torneo de esta magnitud.

El equipo dirigido por José Letelier perdió 3-0 ante Estados Unidos, 2-0 frente a Suecia y derrotó 2-0 a Tailandia. Resultados que, sopesando el nivel de sus dos primeros rivales, son positivos y generan esperanza de cara al futuro, teniendo en cuenta que el Mundial siguiente se realizará el 2023.

Una de las jugadoras que ha hecho noticia, inicialmente por no ser convocada y luego por sumarse al plantel tras la lesión de Ana Gutiérrez, es Fernanda Pinilla (25). La lateral, que cambiará de club en España desde el Córdoba CF al Badajoz de la Segunda División, concedió una dilatada entrevista a La Tercera, donde habló del rendimiento de Chile en Francia 2019, del llamado a último minuto de Letelier y de su sexualidad. “Sí me he sentido discriminada por ser lesbiana”, confesó.

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Su análisis del Mundial

Pinilla es una voz autorizada para hablar del rendimiento de la Roja. Pese a su corta edad, la ex U. de Chile es una de las más experimentadas del equipo. Al ser consultada por el rendimiento de la Selección en Francia 2019, dijo: “El balance es súper positivo. Lo que vivimos entrega esperanza e ilusión para el futuro de la Selección”.

Sobre el penal de Francisca Lara que dio en el larguero en el duelo contra Tailandia -y que impidó que la Roja avanzara a octavos- respaldó a la ejecutante: “Yo he estado en esa posición. Al fallar sientes que le fallaste a tu equipo. Pero esto es un deporte de equipo. El penal es algo fortuito. La Pancha es una excelente jugadora. Se sacó la cresta por estar ahí”.

Uno de los temas que generó más ruido fue que Letelier inicialmente no la convocó a la lista de las 23. Ante esto, Fernanda expresó: “Fue desafortunado subirme por una lesión, pero me imagino que la decisión de no jugar fue por gustos, sensaciones de los entrenadores”.

—¿Basta un mal partido de preparación? ¿No hubo más?
—Es que eso depende de la forma de trabajar de cada persona. No sé si yo hubiese bajado a una persona por un mal partido. Muchas de las seleccionadas hemos tenido malos partidos. No sé si se me midió con la misma vara que a todas. Esa sensación queda cuando no te dan explicaciones. Pero no tengo por qué pedirlas. Uno queda con esa sensación: ¿de verdad por un partido quedo fuera? No es que me sintiera segura en la nómina, pero días antes pasaron situaciones que me hacían creer que estaba en la nómina.

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—¿Qué situaciones?
—Llamaron a mi papá para pedirle una carta para que yo la leyera como sorpresa en Francia. Mi papá no me lo dijo entonces, me lo dijo a los días de no aparecer en la nómina. Pensó después que lo estaban agarrando pal hueveo. Y antes empecé a sentir cosas raras, que no iba a ir al Mundial. Mi papá me decía que estuviese tranquila, que tuviese fe. Y a los días me contó todo esto. Eso me da más luces que de verdad me bajó por un partido. Fue raro”.

Consultada respecto a si el camarín del seleccionado es “cabrón”, la licenciada en Física aseguró que no es cierto y que “es muy rico, bien humano. Hay roces como en todos los equipos, pero no lo definiría como un camarín cabrón”.

Una verdad incómoda

Cuando ahondaron sobre cómo había sido para ella salir del clóset y contar públicamente de su sexualidad, la lateral manifestó: “Sí me he sentido discriminada por ser lesbiana. Cuando era más niña. Por gente que trabaja en los equipos, no por mis compañeras. Gente de más arriba, del área médica, en donde uno sentía el trato distinto. O quizás era la sensación. Simplemente como que te lo prohibían”

Una de las situaciones más extremas que le tocó vivir fue cuando, “estando en una Selección Sub 17, con 16 años, a un entrenador se le ocurrió hacer una charla para preguntarnos por nuestra orientación sexual. No le vi ni le veo sentido. Uno no anda haciendo charlas o anda preguntándole a los niños en el curso por su orientación sexual, por ejemplo. Encuentro fuerte indagar en la sexualidad de las jugadoras. Esas cosas son señales, discriminación indirecta. ¿Por qué le tiene que importar o por qué manipular mi sexualidad?”.

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Finalmente, y referido a cómo la homosexualidad es abordada en el fútbol masculino, aseguró“Lo he pensado muchas veces. En una sociedad como la chilena es muy difícil hacerse público como homosexual. Siendo mujer es difícil, pero en el fútbol es mucho más difícil para un hombre hacer pública su homosexualidad. Todo este prejuicio viene del machismo de la sociedad”.

Y sentenció: “Lo que se espera del machismo es que el hombre sea bien hombrecito, bien fuerte. Entonces no se explica que tenga sensibilidad por otro hombre. Para los hombres es más difícil manifestar que se tienen esas sensibilidades por otro hombre. En el fútbol debe pasar eso. No creo que la concentración sea la misma que la de mujeres, por un tema de estudios, no porque lo diga yo, pero en el fútbol masculino la homosexualidad sí se esconde, mucho más. Por el simple hecho del machismo que gobierna la sociedad”.

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