Sin duda, el rol que juega la transparencia en el ámbito del presupuesto fiscal no sólo es fundamental, hoy en día podemos decir, sin temor a equivocarnos, que es un elemento constitutivo de la elaboración y ejecución del presupuesto de la nación, sin la cual simplemente no es posible tener una política fiscal que cumpla con estándares que permitan el control social por parte de la ciudadanía.
Lo anterior, no solo es una cuestión declarativa sobre lo beneficioso de la transparencia, sino que ésta tiene impactos concretos en la rendición de cuentas de la eficiencia y efectividad del gasto público, ayuda a prevenir la corrupción y mantener altos estándares de integridad pública, potencia la confianza de la ciudadanía sobre el gasto público y mejora la calidad de las políticas fiscales, su impacto y equidad.
Recientemente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha destacado el desempeño del país en materia de transparencia fiscal, subrayando el rol de instituciones fiscales sólidas que han contribuido a la estabilidad macroeconómica de Chile, y valorando positivamente las iniciativas que buscan fortalecer estas instituciones y elevar la transparencia fiscal.
Los componentes que fueron mejor evaluados refieren a las prácticas relacionadas con la previsión fiscal y la elaboración de presupuestos y la presentación de informes fiscales, por contrapartida, los puntos más bajos de la evaluación refieren a las dimensiones de análisis y la gestión del riesgo fiscal, lo que, de acuerdo con el informe del FMI, podrían mejorarse de manera sustantiva y con relativa facilidad mediante la publicación más oportuna y accesible de la información ya disponible. Sin duda, el portal de presupuesto abierto de la Dirección de Presupuestos (DIPRES), es un tremendo aporte en esta línea.
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Bajo esa mirada, en cada discusión parlamentaria del presupuesto fiscal anual el Consejo para la Transparencia ha hecho recomendaciones muy concretas de perfeccionamiento normativo para ser consideradas en la tramitación legislativa del proyecto de ley de Presupuestos del Sector Público, que atendida la relevancia del derecho de acceso a la información pública y la necesidad de disponer de forma proactiva hacia la ciudadanía información presupuestaria que dé cuenta del buen uso de los recursos públicos, apuntan a facilitar el acceso de información a los usuarios y terceros interesados, con el objeto de favorecer el control social sobre la ejecución de los recursos públicos.
Asimismo, los avances en materia de transparencia fiscal que se estipulan en el proyecto de Ley de readecuación a la actual Ley de Transparencia, que establecen nuevas obligaciones a los organismos públicos sobre publicación de estados financieros y patrimoniales, pasivos y activos, y la incorporación de obligaciones de transparencia activa para entidades privadas que reciben fondos públicos, son importantísimos avances en lo que se deben afinar adecuadamente sus detalles, para aprovechar al máximo el potencial de estas mejoras.
En definitiva, mejorar la disponibilidad de información presupuestaria, aumentar la utilidad de la información fiscal según consideraciones de los usuarios mediante la generación de espacios de participación, fortalecer la institucionalidad encargada de la elaboración y de la fiscalización del ejercicio presupuestario, profundizar información en formatos abiertos, estandarizar los informes financieros y disponibilizar datos sectoriales, entre otras acciones, son elementos claves que hay que seguir fortaleciendo en las normativas y herramientas que nos han permitido tener importantes progresos y que a la vez nos muestran los permanentes desafíos que existen en esta relevante materia.
Los estándares y evaluaciones internacionales y los significativos avances que se le reconocen a nuestro país en esta temática, demuestran con total claridad que la transparencia es un elemento que, más allá de ser un principio o un valor necesario para las distintas áreas de la función pública, se configura como una herramienta concreta y útil para el mejoramiento de la gestión gubernamental, y en este caso, de un área especialmente crítica como es la gestión presupuestaria del país.
Como Consejo para la Transparencia estamos confiados en que el inicio de un nuevo año fiscal y la próxima instalación de nuevas autoridades nos permitirá seguir avanzando en esta senda, pues la claridad, confiabilidad, frecuencia, puntualidad y pertinencia de los informes fiscales públicos y la cualidad de ser plenamente abierto con las personas acerca de la recaudación y uso del dinero que es de todos y todas, deben ser elementos centrales del presupuesto de la nación.
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