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El informe de productividad del proyecto que sube la tasa de cotización en 5% con cargo al empleador, entregó importantes datos sobre su efecto en el empleo.

Por ejemplo, se calcula una reducción de entre 2,35% y hasta 7,45% del trabajo asalariado en el corto plazo. Según el reporte, esto se traduce entre 2.200 y hasta 394.000 puestos formales menos.

La información se conoce tres días después de que el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, asegurara en Tolerancia Cero que el impacto sería “prácticamente nada en el tiempo porque esto se hace de manera gradual, la productividad crece y, por lo tanto, es facil de acomodar en el tiempo”. 

Respecto a los salarios líquidos, se proyecta que bajen 3,3% en el largo plazo, aunque también se cita una simulación del Banco Central que cifra en 1,9 por ciento la baja en las remuneraciones reales, o sea, descontando la inflación.

Al respecto, Hacienda argumentó que esto se trata de las cotas superiores que se estimaron, que suponen que el 5% no se considera como beneficio para las personas. Es decir, el peor escenario base.

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