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Este martes se confirmó que el ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, deberá hacerle frente a la justicia luego de que el Tribunal Federal de Paraná aceptara la denuncia interpuesta por la Fiscalía por supuesta corrupción en el caso Petrobras.
Se le acusa de haber recibido cerca de 3,7 millones de reales en sobornos a cambio de favores políticos. Además de él, su esposa y otras cinco personas ligadas a la empresa serán procesados.
Hace unos días el ex mandatario se había defendido diciendo: “Prueben una corrupción mía e iré caminando a la cárcel”.
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