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El narcotraficante escapó la semana pasada desde la cárcel.

Rastreadores satelitales, drones y otros sofisticados aparatos de comunicación. Esa es la tecnología de punta que está siendo ocupada para recapturar al narcotráficante Joaquín “el Chapo” Guzmán, en un esfuerzo conjunto entre los gobiernos de México y Estados Unidos.

Entre los objetivos del operativo, está además lograr dar con pistas a través de la detección de llamadas telefónicas y registros de voz que permitan dar con el paradero del líder del cártel de Sinaloa, que escapó desde una prisión de máxima seguridad.

Además, en Colombia confirmaron que están colaborando con México y que ya tienen los datos, como huellas dactilares y posibles nombres falsos, para identificar al capo de la droga ante un eventual escape hacia el país sudamericano.

Pese a estas medidas,  las críticas hacia el gobierno de Enrique Peña Nieto se multiplican. Las autoridades reconocieron que Estados Unidos había solicitado la extradición del capo de la droga, dos semanas antes de su fuga, información que ha hecho crecer los cuestionamientos.

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