Confianza, voluntad política, seguridad, integración y calidad son claves que pretende trabajar Chile con la potencia asiática.
Si bien Chile es el tercer socio comercial de China, cuyas transacciones generaron aproximadamente $US 34 mil millones en 2014, solamente $US 300 millones fueron producto de la inversión del gigante asiático en nuestro país. Por esto, las autoridades buscan generar lazos de confianza para atraer la inversión en infraestructura de esa potencia.
Junto al economista Luis Eduardo Escobar, asesor del Consejo de Políticas de Infraestructura, analizamos en Agenda Económica el panorama actual entre ambos países y los desafíos para plantear a Chile como un territorio ideal para generar infraestructura a largo plazo, a pesar de ser una economía bastante pequeña.
“La piedra de tope ha sido que Chile no tiene los suficientes recursos para invertir todo lo necesario en infraestructura, y a China precisamente lo que le sobra son recursos financieros y la capacidad tecnológica para realizar proyectos en el territorio”, indicó Escobar, aunque advirtió que el principal problema responde a que estos negocios no son más baratos que las licitaciones ganadas por países como España porque “los chinos tratan de atar la inversión en infraestructura a la participación de lo que se produce”.
Sin embargo, nuestro país, atractivo por sus recursos naturales, es también la puerta de entrada para hacer otros negocios en América Latina.
Más detalles, en la entrevista.
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