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El homenaje al brigadier en retiro Miguel Krassnoff, condenado por violaciones a los derechos humanos, se realizó la tarde de este lunes en el Club Providencia. Al evento se opusieron diversas organizaciones, al punto que tuvo que intervenir personal de Fuerzas Especiales de Carabineros para controlar los incidentes.

Para analizar este homenaje, en CNN Chile conversamos con el escritor y periodista Hermógenes Pérez de Arce, quien participó en la actividad. "Ha sido un homenaje sorprendente por la cantidad de personas que ha venido, los organizadores tenían temor que no viniera mucha gente, pero finalmente con toda la publicidad que la extrema izquierda le dio a la presentación de este libro, llegó una cantidad impresionante de gente, el local se hizo estrecho, la gente quedó fuera".

 

 

"Ha habido un verdadero cerco terrorista alrededor del estadio en donde se hizo la presentación del libro, lanzaron muchas piedras,  hay muchos vidrios, hay personas que sufrieron lesiones, personas que han salido y han sido atacadas. Se ha manifestado lo que es la izquierda en toda su más fiel expresión: violencia, intolerancia y persecución de las personas democráticas, como lo hicieron en 1973 y como lo han hecho cada vez que han podido", remarcó el escritor.

 

Hermógenes Pérez de Arce además defendió la labor de Miguel Krassnoff, asegurando que no existen pruebas de que interviniese en la detención de personas y que este no tenía relación con la cúpula de la DINA. "Eso ha sido toda una fabricación que no corresponde a ninguna realidad, porque Krassnoff era un teniente joven que se desempeñaba como analista de inteligencia y tomaba declaraciones, pero es un hombre de gran integridad y muy buena formación, nunca habría procedido a apremios ilegítimos contra nadie", señaló.

 

El escritor además se refirió a los casos de las personas que durante la jornada conversaron con CNN Chile, afirmando que el ex brigadier los había torturado, como es el caso del historiador Gabriel Salazar. El escritor explicó así que Krassnoff no tenía esa función y, si lo hubiese hecho, sus denunciantes "deberían haber interpuesto acciones" y no aparecer "40 años después […] sin accionar para hacer valer el posible delito que habría sufrido"

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